Johana

9 Meses de un viaje extraordinario.

Me llamo Johana y hace 9 meses que deje el alcohol y el tabaco.

Hace unos días alguno de vosotros me preguntasteis sobre mi experiencia en ese recorrido sin alcohol y he decidido poner en orden mis ideas en este pequeño escrito,

Antes de esos 9 meses yo llevaba enganchada al alcohol sobre dos años.

Empezo siendo algo sútil e inofensivo los fines de semana para relajarme del trabajo.

Poco a poco lo que fue una lata de cerveza un viernes por la noche se convirtió en un litro de cerveza durante todo el fin de semana y del fin de semana pase a los días de diario.

Sin darme cuenta bebía cada día y mi vida se convirtió en un auténtico infierno.

Todos sabéis de qué hablo cuando os digo que las resacas eran terribles y sentía que mi vida ya no me pertenecía.

Un día después de una resaca decidí que era suficiente y que tenía que parar o algo peor estaba por llegar.

No sabía por dónde empezar y estaba realmente asustada pues la sensación de sobriedad me causaba vértigo y miedo.

Tampoco sabía cómo trazaría un plan para mantenerme sobria el resto de los días así que busqué ayuda y fue así como desembarque en este barco.

A día de hoy pienso que eso fue mi tabla de supervivencia pues encontré a personas que estuvieron y están cada día conmigo con un simple « HOLA » O « ¿Cómo va todo ? ».
Al comienzo de mi viaje pensé que mi vida volvería a cuando no bebía pero nada más lejos de la realidad.

Todo fue nuevo para mi y me costó bastante reconstruirme a mí misma, Las personas que me rodeaban ya no fueron las mismas y mis rutinas diarias también cambiaron de forma drástica.

Me di cuenta que tenía que cambiar mucha cosas dentro de mí para continuar y aunque penséis que eso fue tarea ardua os tengo que decir que ha sido y es un viaje extraordinario por la VIDA.

Hay días que el mar está en calma, hay días en que todo me parece una montaña cuya cima no puedo alcanzar pero hay días en que la MAGIA de la vida aparece y recorro parajes donde puedo cargarme de energía e ilusión.

Sin darme cuenta he llegado hasta ahora escribiendo este pequeño texto para deciros que una vida sin alcohol es posible.

La clave de todo eso es decir BASTA y tener la convicción y el coraje de seguir hacía delante.

La propia inercia de vuestro deseo os llevará allá dónde queráis ir sin daros cuenta,

No tengaís miedo en ello pues si viajais en este barco yo y muchas personas estaremos disponibles para ayudaros y animaros en vuestro viaje.

Hasta otra tripulantes.